¡Ole, marineros!
La gente que me conoce sabe que soy muy pero que muy del norte, en carácter, en humor y en gustos. Por ello, suelo elegir el Cantábrico o Atlántico para mis escapadas, para prueba mis últimos artículos de viajes, que puedes consultar aquí.
Pero también es cierto, que con 33 años (en aquel momento, ahora ya son 34) era un poco vergonzoso no conocer Andalucía. ¡Nada! Ni Córdoba, ni Granada, ni Cádiz… Así que, hace unos meses llegó el momento.
Por ello, improvisé un viaje barato con la intención de escapar de la lluvia que amenazaba a toda España, incluyendo las islas Baleares y Canarias. Me puse a bucear en internet y contrasté los datos de The Weather Channel (me encanta esta página para mirar previsiones meteorológicas a largo plazo) con los vuelos que existen desde Galicia. Como resultado salió la capital andaluza, con conexión directa de Vueling desde el aeropuerto de Alvedro.
Por ello, hoy os traigo mi escapada de fin de semana a Sevilla.
Dónde alojarse
Lo primero es buscar alojamiento. Yo, que por mi trabajo no podía tener vacaciones en verano, estaba obsesionada con el sol (a principios de abril, ojo con lo que pedía) y me obcequé en que el alojamiento tuviera piscina.
Pero claro, entre mis requisitos siempre está que el hotel sea céntrico y compaginar ambas cosas sin pagar un dineral, no era fácil. Encontré unos cuantos y el siguiente obstáculo fue que la mayoría no abrían la piscina hasta más entrada la primavera.
Ante tanta selección, el ganador fue el hotel Bécquer. ¡Y menudo acierto! Por unos 130 euros la noche en habitación doble tenéis un hotel con piscina en pleno centro de Sevilla (en la calle Reyes Católicos, 4) con desayuno bufé incluido, muy bueno, por cierto. Nosotros podíamos salir todas las noches y volver andando tranquilamente. Además, el bus del aeropuerto también os deja muy cerquita de él.
Y vosotros diréis, ¿pero llegaste a usar la piscina? Pues sí, el último día hacía calor y necesitábamos descansar después de la caminata de la mañana, así que me subí a la terraza, con vistas a la Giralda, y allí estuve tomando el sol. Hasta me metí en el agua en presencia de cuatro extranjeros sorprendidos que eran los únicos que, como yo, estaban en bañador. ¡Pero es que, señores, les juro que el agua de la playa de Riazor en pleno mes de agosto está más fría!
Dónde picar algo
No sé si vosotros sois de los que os gusta conocer los lugares más típicos cuando viajáis o preferís innovar. Yo combino las dos opciones y en mi viaje a Sevilla tenía claro que quería conocer el bar Las Columnas, uno de esos locales de toda la vida, que se ha hecho tan famoso que está plagado de guiris.
Como nosotros fuimos en temporada baja (antes de Semana Santa), tuvimos suerte, pudimos pedir sin dificultad e incluso estar apoyados en una mesa alta.
Como nosotros fuimos en temporada baja (antes de Semana Santa), tuvimos suerte, pudimos pedir sin dificultad e incluso estar apoyados en una mesa alta.
La bodega de Santa Cruz Las Columnas, que así se llama en realidad, es una tasca de estilo clásico con decenas de tapas y montaditos. Es como si fuera La bombilla de A Coruña, pero al lado de La Giralda. Puedes tomar un par de cortos o sangrías, acompañadas de platos típicos como la “pringá” y seguir de ruta por el centro.
Dónde comer
Si lo que buscamos es comer de plato o raciones, hay un lugar que descubrimos de casualidad y que nos gustó, el bar Carmela. Aunque en realidad nosotros fuimos a cenar.
Era tarde y teníamos miedo de que ya no nos sirvieran en muchos sitios, así que al encontrar una mesa libre en su terraza y ver que los precios no estaban mal (un plato de solomillo, 12 euros y una especie de timbal de verduras, 3,90 euros), probamos.
Para mí fue un acierto, comida rica y variada, trato amable y en pleno centro de Sevilla. Eso sí, con la cuenta nos trajeron dos chupitos que no bebimos y casualmente en el recibo nos cobraban una copa de más por error, o al menos eso quiero pensar. Pero, por si acaso, revisad el recibo.
Era tarde y teníamos miedo de que ya no nos sirvieran en muchos sitios, así que al encontrar una mesa libre en su terraza y ver que los precios no estaban mal (un plato de solomillo, 12 euros y una especie de timbal de verduras, 3,90 euros), probamos.
Para mí fue un acierto, comida rica y variada, trato amable y en pleno centro de Sevilla. Eso sí, con la cuenta nos trajeron dos chupitos que no bebimos y casualmente en el recibo nos cobraban una copa de más por error, o al menos eso quiero pensar. Pero, por si acaso, revisad el recibo.
Qué ver (y qué no)
En una escapada de fin de semana a Sevilla da tiempo a ver todos los imprescindibles de la ciudad, pero yo no soy de esas turistas que entran a todos los monumentos y pagan por cada atracción. Así que, aquí os presento mis recomendaciones:
- Los Reales Alcázares
Tenía claro que quería entrar a ver el Real Alcázar de Sevilla porque, entre otras razones, allí se grabaron los capítulos de Juego de Tronos ambientados en Dorne. Parece que en mis últimas escapadas estoy persiguiendo los escenarios de la serie (aquí, en Rocadragón).
El interior del Real Alcázar es bellísimo y estuvo bien pasear por sus jardines, aunque admito que me defraudó un poco el cuidado de algunas zonas.
Si queréis entrar, mejor que compréis antes los tiques, sé de algún ingenuo que pensó que podía llegar y entrar y se quedó con las ganas de conocerlo.
Además, los lunes la entrada es gratuita, solo tenéis que solicitarla por internet (aquí) y pagar un euro por gastos de gestión. Lo mejor, no tendrás que esperar largas colas. Claro que si os vais de escapada de fin de semana a Sevilla, no podréis disfrutar de esta oferta.
- Plaza de España y el parque de María Luisa
La plaza de España y el parque de María Luisa son uno de los imprescindibles de Sevilla y uno de los lugares favoritos de los turistas. No es para menos. Hablamos de una plaza enorme en tonos rojizos con representación de (casi) todas las provincias españolas y rodeada por grandes jardines.
La plaza de España es, también, otro escenario de cine. En ella se rodó, por ejemplo, El ataque de los clones de Star Wars, entre otras.
- Las Setas de Sevilla
Cuando volví de mi escapada de fin de semana en Sevilla me sorprendió que muchos de los que ya habían estado en la capital andaluza no sabían lo que era el Metropol Parasol. Eso es así porque las más conocidas como Las Setas se terminaron de construir en 2011.
Consisten en una curiosa estructura de madera de 150 metros de largo erigida sobre la ciudad y que, la verdad, no tiene nada más que las vistas, pero por tres euros (e incluye una consumición en un bar del exterior) está bien para pasar el rato y ver el atardecer desde las alturas. ¡OjO! os advierto que no se puede pagar con tarjeta.
Consisten en una curiosa estructura de madera de 150 metros de largo erigida sobre la ciudad y que, la verdad, no tiene nada más que las vistas, pero por tres euros (e incluye una consumición en un bar del exterior) está bien para pasar el rato y ver el atardecer desde las alturas. ¡OjO! os advierto que no se puede pagar con tarjeta.
Lo que opté por desechar fue subir a la Giralda, dicen que su interior no tiene nada de especial, salvo las vistas. Tampoco entré a la pequeña Torre del Oro, de la que se puede disfrutar paseando por la ribera del río Guadalquivir.
A dónde sí fui y no os lo recomiendo por nada del mundo es a la isla de la Cartuja. Queríamos ver la antigua fábrica de loza pero la idea fue un fracaso. El camino hasta allí no es nada agradable y es muy largo para hacer andando (nosotros, lo hicimos, ida y vuelta).
Una vez allí, el recinto es una auténtica decepción, está completamente abandonado, las chimeneas tan características de la fábrica, llenas de basura, vegetación sin cuidar... Y eso a pesar de que el antiguo monasterio sí tiene vida, es el actual Centro Andaluz de Arte Contemporáneo. Así que, ya sabéis, no vayáis.
A dónde sí fui y no os lo recomiendo por nada del mundo es a la isla de la Cartuja. Queríamos ver la antigua fábrica de loza pero la idea fue un fracaso. El camino hasta allí no es nada agradable y es muy largo para hacer andando (nosotros, lo hicimos, ida y vuelta).
Una vez allí, el recinto es una auténtica decepción, está completamente abandonado, las chimeneas tan características de la fábrica, llenas de basura, vegetación sin cuidar... Y eso a pesar de que el antiguo monasterio sí tiene vida, es el actual Centro Andaluz de Arte Contemporáneo. Así que, ya sabéis, no vayáis.
Como precisamente lo que me gusta a mí es andar y descubrir lugares bonitos os diré otros sitios que ver desde la calle: el Costurero de la Reina, el barrio de Triana (desde un lado y otro del río) y, por supuesto, el puente de Isabel II, mejor si es de noche.
Dónde cenar
Después de tanto paseo y antes de despedir este artículo sobre una escapada de fin de semana a Sevilla, me falta recomendaros un lugar para cenar. Aquí no tengo duda, el restaurante El Pintón. Fue una sugerencia de una amiga y me encantó.
Dejamos a un lado las bodegas y tascas porque este es un local elegante, bien decorado y con comida rica (y más escasa). Vamos, de postureo, pero vale la pena. Recuerdo que me encantó su tartar de atún rojo (a 12,50 euros) y también nos sorprendió el risotto (a 8,50 euros). Para dos, yo os aconsejo que pidáis tres platos.
Terminada la cena en El Pintón, es hora de despedirse hasta el próximo post, al que que aún estoy dando vueltas porque se trata de una fecha especial para Llegando a puerto.
Mientras, contadme cuál es vuestro plan para este puente de Todos los Santos. ¿Tenéis destino? ¿Ya conocéis Sevilla? ¿Qué otra ciudad andaluza recomendáis?
Genial! Tengo que ir la próxima semana y como no vamos a tener mucho tiempo libre pues me ayuda a saber a donde ir y aprovecharlo!
ResponderEliminar¡Me alegro de que sea útil! Un saludo y gracias por escribirme ;)
EliminarSi vas a hacer una escapada de fin de semana o te vas de vacaciones en familia, debemos de equipar el coche con las sillas de los niños y niñas. Los pequeños de la casa deben de ir sentados en su silla y bien protegidos con el cinturón de seguridad. En función de la edad deberán de utilizar una y otra y cuando sean mayores o superen la altura necesaria podrán dejar de llevarla.
ResponderEliminarExcelente guía para una escapada a Sevilla, sobre alojamiento, gastronomía y lugares de interés. Ideal para planificar un viaje bien organizado y culturalmente enriquecedor. Manali Shop añadiría productos premium de vapers y cachimbas para una experiencia completa en la ciudad.
ResponderEliminarManali Shop