Restaurante The Wolf:
alta cocina a precio de ración


¡Hola marineros! Hoy os traigo hasta Llegando a puerto una recomendación. En lugar de una selección de restaurantes, de esas que tanto os gustan (la última de la calle Galera fue un éxito), hoy dedico este post a un único local de hostelería. Lleva un tiempo abierto pero me da la sensación de que aún no es muy conocido, puede que debido a su situación, ya que está un tanto escondido en la calle Comandante Fontanes. Os hablo del restaurante y bar The Wolf. ¿Lo conocéis? Si no, yo os lo descubro.


The Wolf es un restaurante de cocina de calidad, yo lo consideraría de alta cocina, aunque no sé muy bien qué características debe tener un local para entrar en esa denominación. Si los requisitos son ingredientes de primera calidad, platos bien elaborados, ambiente agradable y buen servicio, los cumple todos. Este podría ser un buen resumen, pero vamos a profundizar.


Carta variada


En la carta de The Wolf podéis encontrar bastante variedad de platos para todos los gustos y bolsillos: desde arroz con lubrigante y carpaccio de solomillo de buey por 25 y 14 euros, respectivamente, hasta tostas de jamón  con mermelada de tomate y queso San Simón (9 euros) , croquetas (10,50 euros 10 unidades) y croca de ternera (14 euros).

Claro que aquí nada es tan sencillo. Las croquetas  son “tigre”, lo que significa que pican ligeramente y están rebozadas en semilla de amapola. La croca, en lugar de venir acompañada de patatas, está servida sobre una cama de tortilla de patatas bastante cruda con huevos camperos y patatas de Coristanco. Ambos platos, sabrosos y recomendables para todos los públicos. 

Ahora, que si con algo me quedo, es con los langostinos gigantes en pan japonés (12 euros). No se trata de un plato nuevo, de hecho, hoy en día está muy de moda y se ofrecen en muchos locales, pero ¡ay, amigo, cuando pruebas estos! Nada tiene que ver con los que solemos tomar, por ejemplo, en la calle de la Barrera. Eso de “lagostinos gigantes” es porque vienen enteros, con cabeza incluida, y puede que por eso tengan tanto sabor. No sé cuál es realmente la causa pero lo cierto es que saben a marisco, no como las colas rebozadas que sirven en otros restaurantes.


También hay recetas aptas para vegetarianos como el falafel de lenteja roja (8 euros) o la hamburguesa de berenjena con pan de aguacate y frutos secos (9 euros). Admito que no soy precisamente vegana, pero me gusta la verdura y se me hace la boca agua solo de pensar en estas recetas.


Cócteles y postres


Como sé que muchos sois amantes de lo dulce y que la mayoría de comensales dejan siempre un huequito para la sobremesa, tranquilos que también me fijé en su carta de postres para hablaros de ella.  Hay panna cotta de chocolate blanco, tarta de queso con arándanos, tiramisú, crumble de manzana y helados de Bico de Xeado, que ya sabéis que son de producción gallega y natural. Nosotros compartimos un coulant de chocolate negro y helado de mandarina que, en la línea del resto, estaba muy sabroso.

Pero no contentos con eso, en todas las mesas, al finalizar el servicio ofrecieron unos bombones artesanales que elaboran en exclusividad para este local. El interior, tiene un sabor similar al Ferrero Roché, pero de textura diferente, más suave, y su cubierta está hecha de chocolate Rubí. ¿No os suena de nada, verdad? Tranquilos, yo puse la misma cara extraña cuando me lo dijeron. Es un nuevo chocolate que se caracteriza por su color rosa y, al parecer (puede que por la novedad), es uno de los más apreciados a día de hoy y caros, vamos, para que negarlo. Os puede gustar más o menos, pero es un bonito detalle con el que agasajar a los clientes. ¡Ah! Y también os ofrecen una hora de aparcamiento gratuito en el párking del Obelisco. ¡No os olvidéis de pedirla!


Decoración y trato agradable


Ya sé que lo de la decoración es un extra, pero ¿quién no prefiere cenar en un entorno agradable y cuidado? The Wolf también lo tiene. Mesas y paredes decoradas con estilo y entre las que destaca el gran mural de la pared: a un lado un gran lobo haciendo alusión al nombre del local y al otro, una caperucita roja, un tanto oscura, en el parque de los menhires de la Torre de Hércules. Casualmente el autor (os prometo que lo descubrí al llegar y ver su firma) es el pintor Edgar Ortiz (si no sabéis de quién os hablo, os falta leer este post: 7 regalos originales para Navidad).

Para rematar mi crítica he de deciros que The Wolf tiene dos plantas y la inferior, desde la que se ve la cocina a través de un gran cristal es ideal para celebrar cenas de cumpleaños o trabajo.


Como ya os he dicho, The Wolf está en Comandante Fontanes, 17 y abre todos los días en horario de 08.00 a 00.00. Los viernes y sábado hasta las 03.00 de la madrugada, claro que los fines de semana comienzan a trabajar a las 12.00 horas. Pretende ser, además de restaurante, bar de día y el local ideal para tomar una primera copa de noche. De hecho, tienen una amplia variedad de bebidas alcohólicas y preparan unos cuantos cócteles que no os puedo recomendar porque no he probado: mojito, daiquiri, caipiriña y ruso blanco.

Admito que en mi visita me quedé con ganas de probar más platos como el calamar de la ría entero a la plancha o los chupachups de chorizo ibérico y queso, aunque solo sea por ver su aspecto. Así que supongo que me tocará volver. ¿Y vosotros? ¿Vais a seguir mis consejos y visitarlo? ¿O ya lo conocéis? Si es así contadme qué os ha parecido y recomendarme alguno de sus platos.

¡Nos vemos pronto!

Comentarios

  1. Mmmmm, ñam ¡Rico! Hay que volver y probar lo que nos falta ;)

    ResponderEliminar
  2. Wow!!! Esto hay que probarlo!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y luego me cuentas qué te ha parecido. Un saludo y gracias por escribir.

      Eliminar
  3. Me parece un sitio genial. ¡Lástima que ya no tengo amistades que les guste como a mi los bares y el tapeo. ir de cenas..- Casi todas mis amistades ejercen de abuelas y abuelos y tienen otras`preferencias,cuando no obligaciones. Pero tomo nota, aunque sea para ir yo sola un día a comer. Has hecho un buen reportaje e información sobre un lugar que merece la pena.

    ResponderEliminar
  4. Hola de nuevo, Chela. Pues claro que sí, no te lo pierdas si tienes ocasión y luego me cuentas si te llevas la misma buena imagen que yo. Un saludo.

    ResponderEliminar
  5. Me lo apunto! Menuda pintaza tienen los platos. La verdad es que solo fui una vez y fue a tomar una caña medio rápida, pero no me llegué a fijar en que ofrecían semejantes manjares. Estoy de acuerdo contigo en lo que dices de que igual la ubicación no ayuda a que se conozco mucho, pero ahora que nos lo has descubierto igual empieza a despuntar como uno de la Galera, Barrera, etc. Bicos!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, Antía. Pues cuando vayas me cuentas porque tú controlas muchos de sitios chulos, así que me interesa tu opinión. A ver cómo le va al restaurante, que está tan escondido... ¡Un fuerte abrazo!

      Eliminar
  6. Estoy salivando, ¿Cuando vamos? :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jeje. ¡Cuando desees! Gracias por pasarte por aquí ;)

      Eliminar
  7. Muy buena pinta la verdad!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Está muy rico, vale la pena probarlo. ¡Un saludo!

      Eliminar

Publicar un comentario